lunes, diciembre 03, 2007

THE END


Aunque creo que es obvio, ya que lleva sin actualizarse desde febrero de 2006 (seguro que tengo algún record...), declaro completamente muerto este blog. Algunas de las causas de su muerte, a demás de la vagancia galopante del que escribe, es el no tener un fin específico más allá de contener las chorradas mentales que se me pudieran ocurrir. Por eso he decidido dar carpetazo aquí y comenzar de cero en un nuevo blog:




Aquí colgaré las ilustraciones, cómics y bocetos que realice, intentando (palabrita de Spider-man) hacerlo con más asiduidad de lo que he hecho aquí. Así que, ea, descanse en paz este blog.


lunes, febrero 06, 2006

MEMORIAS DE UN FRIKI

Bueno, después de estos meses de luto en los que hemos guardado un riguroso silencio en honor al finado Sr. Miyagi, volvemos a la carga. Pero como soy el tio mas vago que os podais echar a la cara, voy a recurrir a saquear el trabajo de otros. Algo que he aprendido del Sr. AleS, todo hay que decirlo...:P
En concreto voy a publicar una serie de artículos sobre la vida de un friki que encontré hace unos años en la web de Dreamers. Seguro que más de uno (y de dos...) se siente identificado con el protagonista en algún momento.

EPISODIO I: EL NACIMINETO DEL FRIKI.

Recientemente nos ha invadido una extraña ola de nostalgia de los años sesenta y setenta: Cuéntame, discos que se reeditan, nuevas versiones de canciones antiguas, remakes de películas o series, vuelven a salir los Madelman (aunque yo los recordaba más grandes, será que por entonces yo era niño), Incluso se ha hecho patente en mi mundo más íntimo, el de los cómics: vuelven a salir aquellas historias de Vértice y Bruguera a través de la Biblioteca Marvel y demás reediciones, además, hay una tendencia de “regreso a los orígenes” en los tebeos que ya te cuento. Pero, ¿Qué hay de los años 80? ¿Aquellos que, aunque naciéramos en los setenta, debemos nuestros recuerdos más felices e inocentes a esa década? ¿Es que no tenemos derecho a la nostalgia? Por ello, llevado por la corriente nostálgica que invade nuestra sociedad, he optado por hacer un repaso de mi infancia. Sí, sí, os voy a contar mi vida.Vale, vale, ¿Por qué tengo que usar esta página web para hacerlo? ¿Por qué no lo hago en www.cuentanostuspenas.com , por ejemplo? La respuesta es simple, porque yo soy un freaky. Sí, sí, un freaky. Si los que sois jóvenes y freakies os sentís incomprendidos, marginados por una sociedad que os teme y os odia, este sentimiento no hará más que extremarse con el paso de los años. ¿Independencia? ¡Ja! Cuando me casé, no esperaba que tuviera que volver a comprar los cómics a hurtadillas, leyéndolos a escondidas para que mi esposa no me dijera aquello de “¿Todavía sigues comprando tebeos?”. A veces creo que tuvimos el niño nada más para que yo pudiera ir a las librerías especializadas con la cabeza bien alta y decir “Buenos días, quisiera comprarle a mi hijo de cuatro años el X-Men, el Increíble Hulk, Bone, Spiderman, Sandman y la Liga de los Extraordinarios Caballeros”.Por otro lado, me resulta imposible remontarme a un recuerdo remoto sin poder recurrir al ancla de los cómics, las series de dibujos animados o las películas que se estrenaron por entonces.Así que voy a comenzar a contar mis recuerdos más preciosos: nací en Sevilla, en 1972, por entonces, ponerle a un niño el nombre del abuelo era normal, así que, para mi desgracia, a mi hermano mayor le habían puesto ya el nombre de mi abuelo Antonio, por lo que optaron por el nombre que se había quedado libre, el de mi abuelo Gumersindo, que, además, llevaba años muerto cuando nací, por lo que nunca podré vengarme de él. Poco puedo decir de mis primeros años, porque lo cierto es que mi vida la empiezo a recordar a partir de los ocho, cuando entré en la década de los ochenta: la democracia era algo nuevo, se sufrió el último intento de golpe de Estado, se jugaron unos Mundiales de fútbol aquí, Maradona todavía era un modelo de comportamiento, un delgadísimo Miguel Bosé se vestía con un traje ajustado de Superman (y no me pidan que describa su baile), en los colegios de curas te pegaban cosquis, decir “titi” o “qué puro” era lo más innovador, el anuncio más polémico era el de “Fa” porque se veía lejanamente una teta, los muñecos eran juguetes y no delicadas piezas de coleccionistas, Tulipán aterrizaba sus helicópteros en mitad de los polideportivos para repartir mantequilla, podías jugar con pistolas de mixtos sin sentirte un futuro criminal pro – belicista, los cantantes infantiles cantaban canciones infantiles, las “cosas de mayores” tenían dos rombos, era imposible hacer zapping y los anuncios sólo interrumpían un par de veces las películas.Al lector contemporáneo de capital le parecerá impensable, pero es cierto, por entonces, al menos en Sevilla, no había ninguna librería especializada. Lo más parecido que teníamos era una librería de ocasión que se llamaba Codesal, recuerdo que la llevaba una mujer con acento norteño. Era un establecimiento amplio (tan amplio que hoy la han sustituido una inmobiliaria, una pescadería y un bazar) donde se vendía de todo, desde novelas de bolsillo de Corín Tellado o Estefanía (estas últimas, pese al nombre, eran del Oeste y, por cierto, algunas no eran recomendables para niños ni para ¡mujeres!), clásicos juveniles de Julio Verne, clásicos literarios adaptados para los niños (no me pregunten cómo hicieron para censurar la Celestina), libros religiosos (catecismos, Biblias Juveniles, hagiografías) y, en un mueble bajo y largísimo, cómics de todo tipo. La dueña los ordenaba temáticamente: de superhéroes, de humor, de niñas, recortables (que estaban en la misma estantería), de Disney...Los viernes por la tarde íbamos toda la familia a comprar tebeos (porque así es como los llamábamos) y recuerdo que a los ocho años pude comprar mi primer tebeo: era un tebeo de Superman de la editorial Novaro. Todo empezó cuando quedé hipnotizado por uno de esos tebeos. En la portada aparecía Superman de rodillas, con el traje hecho trizas y ¡sin capa! Frente a un anciano con una enorme barba blanca y con un bastón. ¡Superman se enfrentaba a Dios! (sí, bueno, hay que aclarar que a mí me metieron en un colegio de curas, así que la religión la tenía presente siempre, de hecho, cuando por las noches rezaba, me iba a un extremo de la cama para dejarles sitio al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo). “Mamá” grité mientras corría con el tebeo en la mano “cómprame este tebeo, por favor, mira, Superman se enfrenta a Dios”.-¿Cómo que se enfrenta a Dios?-Pero no te preocupes, al final gana Dios, ¿No lo ves en la portada?Pero mi madre no me lo compró, por entonces estaba castigado por las pésimas notas que había sacado. Intenté sujetarme a un clavo ardiendo y le dije:- Pero mamá ¿No recuerdas que el hermano Secundino dijo que yo necesitaba leer más?- Tienes razón –dijo pensativa- pero no te compraré ese tebeo, no hasta que te sepas la tabla de multiplicar.Entonces se fue a las estanterías de libros juveniles y me compró uno de Julio Verne “Dueño del mundo” de la editorial Bruguera. Mi desilusión no tenía límites, aunque me consoló que el libro tuviera una página de cómic cada tres contándote lo que había sucedido entre todas aquellas letras. Supongo que ella intentó compensar de esta manera, no obstante, Julio Verne se convertiría en una fortísima referencia literaria para mi infancia.Puse el tebeo de Novaro en su sitio con una pena teatral (un último recurso infantil) y me quedé esperando alrededor a ver si lo compraba mi primo Gregorio (sí, la verdad es que mi familia tenía mala leche con los nombres, si no, que se lo pregunten a mi otro primo Estanislao) que, de paso, era la principal fuente de lectura de cómic durante mi infancia, juventud y, aún hoy en día. Pero nada, él prefirió comprarse uno de Bruguera de Spiderman.Tenía que comprarme ese tebeo, del siguiente viernes no escapaba. Durante toda la semana ahorré (sensación nueva para mí), todas las pesetas (que por entonces tenían más valor). Tenía, claro está, la opción de estudiar la tabla de multiplicar pero, para qué engañarnos, me resultaba menos sacrificado juntar las pesetas de las chucherías (quedarme sin quicos ni huevos fritos) y mirar debajo de la lavadora o dentro del sofá-cama del salón. Al final, conseguí las 25 pesetas que necesitaba para comprarlo. Hice un poco de trampas, le pedí a mi madre dinero de más para una goma de borrar y así, ese viernes, tenía ya dinero suficiente para comprarme el tebeo.Fui aquella vez con mi tía para evitar la vigilancia maternal y, finalmente, a la estantería de los tebeos. Busqué el tebeo por todas partes y no lo encontré por ninguna. Alguien lo había comprado. Aprendí la primera lección de un coleccionista de cosas que venden y son escasas: esconde lo que no puedas comprarte en ese momento. Me tuve que conformar con un tebeo donde Luisa, Jaime y Superman se enfrentaban a un tío que estaba hecho de radiactividad o algo así y que al final era engañado no sé cómo. Del tebeo Superman contra Dios jamás supe nada y me quedé con las ganas de saber de qué iba la historia. No obstante, ya desde niño, aprecié ese cómic suplente como el fruto del esfuerzo de toda una semana ahorrando el dinero de las chucherías, registrando la casa o engañando... lo que para un niño equivale a una semana de duro trabajo. El tebeo se convirtió en mi primer tesoro, lo cuidé con esmero y cariño durante mucho tiempo, hasta que lo rompió mi primo chico. El muy cabrón.

sábado, noviembre 26, 2005

EL SEÑOR MIYAGI NOS HA DEJADO.



Noriyuki "Pat" Morita, más conocido como el Sr. Miyagi, falleció el pasado dia 24 de noviembre a la edad de 73 años. Este actor, norteamericano de origen japonés, fue el primer asiático americano en ser nominado a un Oscar por su interpretación en "The Karate kid". Después de eso, solo consiguó aparecer en las secuelas de esta película y producciones de serie B o incluso Z, como "Shadow Fury", o "Van Damme´s Inferno". Solamente a finales de los noventa se le puede rescatar en algún trabajo más respetable, y es que puso la voz del Emperador de China en la producción de Disney "Mulan" y su secuela.


He aquí mi particular homenaje a este actor que quedará para siempre como imagen del maestro de artes marciales honorable y entrañable. Descanse en Paz.

miércoles, noviembre 23, 2005

FIESTA DE LOCOS!!

¡Hola a todos! De nuevo estoy por aquí, en lo que lleva camino de convertirse en el blog que menos actualizaciones tene de toda la blogsfera mundial. Casi dos meses han pasado desde la ultima actualización, y creo que ya va tocando. Como ahora mismo no tengo el tiempo que querría dedicarle a este blog (soy de las pocas personas que aún no disponen de conexión en casa) tengo que contentarme con horas sueltas en cibercafés y en la universidad. Así que ahora solo puedo poneros algunas fotos de las últimas locuras en las que me he visto envuelto y comentarlas brevemente.
Let´s rock!


Bien, pues en primer ligar, aquí tenemos el cartel de "Excelsior (En busca de Stan Lee)", el magnífico cortometraje en el que he participado y que se estrenó mundialmente en la "Segunda Semana del Cómic de Almería", donde, por cierto, me hicieron entrega del segundo premio del certamen de cómic de la provincia.

En El Ejido, que es donde tuvo lugar el evento, pude dibujar codo con codo con el MAESTRO Juan Gimenez, creador de, entre otras muchas cosas, "La Casta de Los Metabarones", junto con Alejandro Jodorowski. Aquí me ven, más ancho que largo.

Estas dos instantaneas pertenecen a la fiesta de cumpleaños/inauguración de casa/desparrame total que hicimos en la casa de mi colega Antoñaso. Creo que no hacen falta comentarios...

Como tampoco hacen falta comentarios en esta otra foto. Que peligro tiene la casa de Antonio, con tanto juguetito suelto...

Y bueno, eso es todo de momento. Os emplazo a que visiteis en pocos días de nuevo este blog, porque tengo preparado un post especial sobre una de mis películas preferidas. Aquí teneis un avance...

miércoles, septiembre 28, 2005

¡EN VERDAD ERA UNA KATANA DE HATTORI HANZO!

Bueno, por aquí estamos otra vez. Hace un més y pico que no escribo nada por aquí, y creo que va siendo hora. Un més y pico. Puede parecer poco tiempo,¿ no? Pues si, poco tiempo, pero a mi me ha pasado de todo. DE TODO: He perdido el curro. Que tampoco era el trabajo de mis sueños, pero bueno, me pagaban religiosamente al final de cada més. Pero en fin, como se suele decir, cuando una puerta se cierra, otra se abre. O la abres tú a martillazos. Estoy pensando en crear mi propia empresa (bueno, mia y de varios más)... Estoy haciendo un plan de viabilidad y, si todo va bien, dentro de algún tiempo habrá una nueva editorial de cómics por estos mundos de Dios, aunque la cose esté ahora un poco parada por lo que os voy a comentar. Por si alguien no lo sabe, mi gran vocación es dibujar. Hacer comics, monigotes en general. Bien, pues poco tiempo después de perder el curro me enteré a través de La Duna, asociación de jovenes dibujantes almerienses a la que pertenezco, que se necesitaba dibujante para un cómic sobre la emigración. 15 páginas. Pago: 600 euros. Vamos, que perdí el culo para presentarme voluntario para hacerlo. Y me lo dieron. Esta mañana he llevado las cuatro primeras páginas, y, en general, salvo algún que otro detalle, les ha gustado bastante. Y ahí vamos al tema de este post. Justo al lado de las oficinas de Asaler, la asociación que me ha encargado el cómic, hay una cuchillería, llamada Filofiel. Hacía tiempo que no me paraba ante el escaparate para ver lo que tenían, porque normalmente no han tenido nada en condiciones, y mucho menos a buen precio. Error. La colección de réplicas de espadas de cine que tienen es bastante buena, y a unos precios muy competitivos: la espada Atlante de Conan, la espada de su padre, la de Valeria, la de Jet Li en "Hero", la de Tom Cruise en "El Último Samurai", montones de espadas de "El Señor de Los Anillos", y por último, a mi caprichín: la auténtica espada de Hattori Hanzo para La Mamba Negra. Impresionante. Entro a preguntar cuanto vale, esperando el sablazo padre, y me encuentro con que cuesta... 85 EUROS!!! (Inciso: para el que no este familiarizado con el tema del coleccionismo de réplicas de armas de películas, decirle que el precio normal de este tipo de cacharros suele rondar los 250-300 Euros, como suele ocurrir con las de "El Señor de Los Anillos" o "Conan", aunque algunas pueden estar sobre los 150-200 Euros. Fin del inciso).
O sea, que me ha faltado tiempo para comprarmela.



¡¡Asi que atentos, chicos, porque ahora poseo una auténtica katana de Hattori Hanzo!!

¿A que es una auténtica preciosidad?
A ver si poco a poco voy aumentando la colección: ya tengo dos katanas, un tanto (puñal japonés), un sable del 7º de caballeria y una cosa oxidada que antes era una replica bastante mala de la Tizona del Cid.

Y ya que estamos, voy a comentar algo sobre esa grán película que es "Kill Bill vol. 1":

Quentin Tarantino es un tío raro, más que un perro verde, pero, por lo menos para mí, es un genio. Y no porque sus películas sean muy innovadoras en cuanto a las historias que cuenta, sino por cómo las cuenta. Tarantino ha creado un universo muy personal en el que las venganzas entre matones, los atracos, las traiciones, son el pan nuestro de cada día, pero con historias que realmente hemos visto mil y una veces: el poli infiltrado, el matón que se lía con la novia del capo mafioso, el boxeador acabado que no quere amañar su última pelea, asesinatos, ajustes de cuentas, traiciones, VENGANZAS... No obstante, sabe darles un toque tan personal a la hora de contarlas, que producen auténtica fascinación. Eso ocurre en "Kill Bill vol. 1", las bandas de yakuzas, los asesinos de élite, las traiciones, las venganzas, el honor... son temas sobre explotados en el cine oriental, y como fan de este cine que es, Tarantino lo que hace es recoger todos estos temas, agitarlos un poco, y contarnos una historia con cientos de referencias a cual mas friki. Y de entre todos los momentos de la película, me quedo con dos, realmente impresionantes:

EL HOMBRE DE OKINAWA


Sonny Chiba, actor veterano de cintas de acción de Hong Kong, hace aquí el que sin niguna duda es el mejor personaje de toda su carrera, el fabricante de katanas retirado Hattori Hanzo. El nombre del personaje es uno de los homenajes frikis de Tarantino al cine de artes marciales, pues Chiba se hizo famoso, entre otras cosas, por protagonizar al ninja Hatori Hanzo en la serie japonesa " Shadow Warrior". Según propias palabras del director, el Hanzo de Kill Bill sería un descendiente directo de aquél mítico ninja.



Sin lugar a dudas esta es la escena más emotiva de toda la película. Arranca con un sentido del humor sencillo al que no nos tiene acostrmbrados el tío Quentin, del que nos esperamos en cualquier momento el chiste más soez, para luego cambiar las tornas y encandilarnos con la ceremonia de entrega de la katana. Realmente impresionante la escena y lo que es capaz de sacar Tarantino de un actor como Sony Chiba.

ENFRENTAMIENTO EN LA CASA DE TÉ

Aquí al amigo Quentin se le va la pelota, haciendo un auténtico "sanguinariamineto", una masacre en toda regla de esbirros que solo sirven para chorrear sangre a mansalva. Pero mola que te cagas. Es una pena que, para evitar las quejas de los productores por la extrema violencia, quitara el color de la escena y lo dejara en blanco y negro.



La escena termina con el inevitable enfrentamiento con O-Ren, la jefa de todos los yakuzas. Tarantino toma como referencia la película japonesa "Lady Snowblood" y lo ambientando todo con música tex-mex, dándole un aire de western al climax del film. Como no podía ser de otra manera, O-Ren muerde el polvo a manos de La Novia, soltando la ya mítica frase "en verdad era una katana de Hattori Hanzo" antes de morir.

Según las últimas noticias que tengo gracias al blog Cineactual, Tarantino tiene previsto hacer la tercera parte... ¡dentro de 10 años!

¡Si, está zumbao, pero mola!

lunes, agosto 08, 2005

BANZAAAAAIIIIIIIIIIIIIII!!!!!!

El pasado sabado, unos amigos y servidor fuimos a cenar a un restaurante japones, un "Sushi Planet" que han abierto hace poco en "Las Cuatro Calles", la zona de marcha de Almería City. Aqui les pongo unas fotillos que hicimos para ilustrar mis comentarios sobre una noche magnífica, por la comida y sobre todo por la compañía.


Bueno, lo primero que los observadores avispados habrán podido contemplar (ademas de la cara de torrija de Antonio... ese de la perilla), es que el camarero, japonés lo que se dice japonés, no era. Que lo mismo el tío esta nacionalizado japonés, o nació en pleno centro de Okinawa, pero vamos, un poco raro si que queda con el kimono rojo. Luego, vimos que el resto de la gente que trabajaba en el restaurante habia nacido en la parte sur de aquél continente que descubrió Cristobal Colón, en especial el metre, que tenía un acento mejicano que tiraba patrás. Cuando nos preguntó que qué queríamos, estuve a punto de decirle: "Pos manito, traete ahoritíta unos frijoles y unos tequilas, güey!!!!", pero vamos, que conseguí contenerme. Ya fuera de coñas, la verdad es que nos atendieron estupendamente, sin ningún tipo de quejas. Bueno, o casi...


Las mesas estan alrededor de la plancha, donde el cocinero prepara en vivo y en directo la comida. Es todo un espectáculo, sobre todo cuando empiezan a hacer malabarismos con los cuchillos. Lo malo es que se le escape alguno y este a punto de hacerle un tercer agujero en la nariz a uno de los clientes. Bueno, pues, ¿¿¿adivinan a quien estuvo a punto de pasarle eso DOS VECES??? Pues sí, a mí, el pringao de turno vamos...


El problema es que la comida japonesa es un tanto dificil de degustar la primera vez, a mucha gente le hace falta probarla un par de veces antes de cogerle el gustillo. Esto les paso a Manolo y a Jose, que en algún momento se vieron en apuros intentando tragarse un trozo de sushi. Por no hablar del wasabi, que para primerizos es bastante fuerte. ¡Ya sabes Manolo, poquito a poco, no medio bote!

Aquí de nuevo vemos a Akira Osvaldo de Todos los Santos Ramíres Fujisaki preparando los platos. Estaban deliciosos. Yo, que iba sin apenas hambre despues del atracón de comida china que nos habiamos dado al mediodía todo el equipo de producción del cortometraje que hará historia "Excelsior! En busca de Stan Lee" (ya os contaré por aquí), en cuanto me llegó el olor de la comida, empecé a salivar cual alien ante la teniente Ripley en braguitas correteando por la Nostromo. Claro que oler, lo olí todo, porque debí convertirme por obra de algún espíritu de samurai cabreado en la campana extractora del local, porque todos los humos iban hacia mí. Pero en el fondo me gusto, no creais...

Y después, habia que tomarse algo para hacer la digestón. Nada mejor que la fórmula magistral del Dr. Calimocho para rebajar la comida, elevar la moral y limpiar cuberterías de plata. Gentileza del Pub Porrón, con sus famosos caramelos Sugus para acompañar.

Para terminar, haremos la ronda de presentaciones de los asistentes. Aquí arriba las cuatro preciosidades que nos acompañaron (de izquierda a derecha): Irene, Nuria, Lucía y Raquel.

Luego tenemos a (empezando de derecha a izquierda): Jose, Antonio, Manolo y un servidor, ese que se parece a un híbrido entre el Monstruo de Frankenstein y el Oso Yogui. Como me aprecio a mi mismo...

Y aqui todos juntos, posando como buenamente podíamos para entrar todos en la foto.

Bueeeeeeno, pues eso ha sido todo. No solo de frikadas va a vivir este blog, de vez en cuando tambien habrá que poner cosas de esas que hacen las personas normales con vida social y todo. La noche del sabado lo pasamos como pitufillos y espero que pronto lo repitamos.

¡¡¡Un saludo a todos!!!

sábado, julio 16, 2005

LOS CUATRO... ¿FANTÁSTICOS?


Ayer por la noche, después de un asfixiante día de trabajo, varios miembros de "La Duna" y un servidor fuimos al cine a ver el estreno de "Los Cuatro Fantásticos". Desde el primer momento ya íbamos con el cuerpo hecho a que lo que íbamos a ver nos repatearía las tripas de principio a fin, pero aún así, queríamos verla. Cosas de frikis, que tiene su grado( y grande) de masoquismo.
Muchas veces uno se pregunta qué tienen por cerebro los productores, directores y guionistas de Hollywood para perpetrar semejante atentado cinematográfico y quedarse tan panchos, pero luego esa respuesta cae por su propio peso cuando estas en la sala del cine y ves como la gente se troncha de risa con chistes infumables y totalmente ridículos, con situaciones absurdas y dialogos propios de primero de EGB. "Para qué nos vamos a currar una adaptación en condiciones, si con las mierdas que hacemos la gente se da de hostias por ir al cine a que les contemos cuatro gilipolleces y nosotros nos forremos", pensarán los mandamases de Hollywood (y de Marvel también, que su parte de culpa tienen...)
Y es que es eso, me temo. La gente se traga lo que le pongan por delante. Y yo, por desgracia, el primero. Y lo peor es que voy al cine sabiendo que me van a dar una ración de mierda a paletadas; que mientras la estoy viendo pienso: "¡joder, si es que esto es una puta mierda!"; y cuando salgo del cine pienso: "menuda pedazo de mierda de película acabo de ver", pero sigo yendo al cine a verlas, con la inocente (e imbécil) esperanza de estar equivocado y ver una película, por lo menos, digna. Cosas de frikis, que tiene su grado, vuelvo a decir, de masoquismo.

Como punto final, una recomendación: absténganse de ver semejante bodrio cinematográfico y empleen su tiempo en algo mejor, lean el comic "Los Cuatro Fanáticos" de AleS, miembro de La Duna, magnífico dibujante y mejor persona, y nominado a "Padre del Año" por la A. P. P. Q. N. S. D. S. M. (Asociación de Padres Primerizos Que No Saben Dónde Se Meten). Aqui podran disfrutar del buen hacer de este artista y de gente de la talla de Santi "The Man" Girón, J.M. Beltrán, Victor Cara y Rocio Serrano. Ellos ya han sufrido la película por ustedes.